Blog de la campaña Building & Abiding

Autor: Padre Noah Lawson

Al comenzar la primera semana de la Campaña Capital "Construyendo y Permaneciendo para la Paz y la Prosperidad del Reino", me sorprende que también estemos en los primeros días de lo que la Iglesia llama la "Semana Brillante" (la semana que sigue inmediatamente a la Fiesta de la Resurrección y da inicio a los 50 días de la celebración de la Pascua). Durante estos días de celebración, nos deleitamos y nos gloriamos en la resurrección de Jesús y sus implicaciones para la vida de sus discípulos: lo que es cierto para Jesús es cierto para quienes lo conocen y lo aman... ¡sus discí

pulos han sido crucificados con él y también han resucitado con él! ¡Qué buena y grandiosa noticia!

Un estudio cuidadoso de la Biblia revela una de las verdades bíblicas más hermosas: ¡Dios tiene un plan para el florecimiento de la humanidad en el presente! El deseo de Dios es que tú, yo y todos los demás no solo sobrevivamos, sino que prosperemos. Nuestro florecimiento y desarrollo son posibles gracias al amor infinito y la fidelidad insondable de Dios, como lo demuestra el milagro de la resurrección de nuestro Señor Jesús. La Campaña de Capital para Construir y Permanecer invita a todos los miembros de la Iglesia Anglicana Emmanuel a participar en el plan de Dios para nuestro florecimiento y prosperidad individual y comunitaria; ¡para que vivamos en la resurrección aquí y ahora!

En Jeremías 29:5-7, encontramos estas notables instrucciones:

"Construyan casas y habiten; planten huertos y coman de su fruto. Cásense y tengan hijos e hijas; busquen esposas para sus hijos y den a sus hijas en matrimonio, para que ellas también tengan hijos e hijas. Multiplíquense allí; no disminuyan. Procuren también la paz y la prosperidad de la ciudad a la que los he llevado al destierro. Oren al Señor por ella, porque si prospera, ustedes también prosperarán".

La primera instrucción de Dios a los exiliados es sorprendente: "Construyan casas y habiten" (Jeremías 29:5a). Les está diciendo que se establezcan en la tierra extranjera, no que vivan como residentes temporales. Este mandato desafía al discípulo a involucrarse plenamente con sus circunstancias actuales, incluso cuando no son las esperadas ni deseadas. Cuando una persona se encuentra en un territorio desconocido, ya sea un nuevo trabajo, una nueva ciudad, una nueva etapa en la vida o incluso una nueva ubicación para su iglesia, como la de 1300 E. Shaw Avenue, su instinto podría ser contenerse, esperar a que las cosas mejoren o a que pueda seguir adelante. Pero Dios nos llama, a los discípulos de Jesús, a invertir en nuestra situación actual.

La siguiente instrucción es igualmente práctica: «Planten huertos y coman lo que produzcan» (Jeremías 29:5b). No se trata solo de agricultura; se trata de crear algo sostenible, algo que se nutra con el tiempo. En nuestras vidas, esto podría consistir en desarrollar nuevas habilidades, cultivar relaciones o invertir en el crecimiento personal. En nuestro contexto como miembros de EAC, ¿cómo se ve cada uno de nosotros desarrollarse, crecer y madurar como discípulos de Jesús? Al comenzar esta serie de sermones para la campaña de capital y seguir preguntándole al Señor qué quiere hacer a través de cada uno de nosotros en esta campaña, nuestro pasaje temático nos invita a una profunda reflexión mientras discernimos las implicaciones de la dirección de Dios para su pueblo. Algunas preguntas que podríamos hacernos son:

¿Cómo estoy echando raíces donde Dios ha plantado a EAC?

¿De qué maneras podría estar eligiendo vivir con una mentalidad de "un pie fuera de la puerta" en lugar de comprometerme con el lugar donde Dios nos ha guiado?

¿Qué "jardines" estoy ayudando a plantar aquí en EAC?

¿Estoy cultivando hábitos, relaciones y los dones que el Espíritu Santo me ha dado para que EAC prospere y no solo sobreviva?

Mientras reflexionan sobre esta escritura y estas preguntas durante la próxima semana, los invito a unirse a mí en oración para ofrecer la Colecta de Capital de la Campaña de Edificación y Permanencia de esta semana:

“Dios Todopoderoso, Padre Celestial, tú eres el creador y sustentador de todas las cosas: permítenos vivir con confianza la visión que has presentado ante la Iglesia Anglicana Emmanuel; para edificar y permanecer donde nos has guiado y para sembrar generosamente con la esperanza llena de fe del fruto que producirás en nosotros; por Jesucristo tu Hijo, nuestro Señor, que vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.”